martes, 22 de mayo de 2012

Simba

Cuando Simba no es más que un recién nacido, el viejo mandril Rafiki lo levanta desde lo alto de la Roca del Rey para mostrar a los animales de la sabana su futuro rey.

Cuando Simba es un travieso y juguetón cachorro, quiere descubrir lo que significa ser rey, y su padre, el rey Mufasa, le enseña las Tierras del Reino, le ayuda a comprender el Ciclo de la Vida y a respetar a todas las especies, pero le prohíbe ir a las Lejanías, Simba quiere demostrarle a su padre que es tan valiente como él,y decide ir a las Lejanías junto a Nala, su inseparable amiga, los leoncitos despistan a Zazú mayordomo de Mufasa que siempre les vigila para que no hagan de las suyas, y llegan a un cementerio de elefantes, y son atacados por tres hambrientas hienas, pero Mufasa llega a tiempo y salva a su hijo, el rey está muy furioso con su hijo, y le dice que solo hay que ser valiente cuando se debe serlo, y que los reyes también tienen miedo, como le había pasado a él ese mismo día, también le dice que los grandes reyes del pasado les cuidan y observan desde las estrellas, y que ellos siempre estarán ahí para guiarle. Al día siguiente Simba se encuentra en medio de una estampida de ñus (trampa que habían planeado su tío Scar y las hienas para matarle), su padre consigue salvarle, pero el rey es asesinado por su propio hermano, pues este, le empuja mientras intentaba subir por la pendiente para no morir aplastado por los ñus, Scar convence a Simba de que él es culpable de la muerte de su padre (ya que Simba no ha visto a Scar empujando a su padre), y le aconseja que huya. Simba llega a un oasis donde conoce a Timón y Pumba, un suricato y un jabalí que le crían y le ayudan a olvidar los males del pasado. Simba demuestra ser un cachorro difícil de manejar pues se mete en todo tipo de líos, saltando entre los árboles, nadando en las cascadas empinadas, y dando vueltas a Timón como un juguete.


Durante una escena de la película El Rey León III, Simba y Timón se enfrentan en un concurso de sorber caracoles, en el que Timón se desmaya al no poder comerse el último caracol que le quedaba. Poco a poco, Simba se va convirtiendo en un león adulto, disfrutando de una vida sin trabajo ni preocupaciones.

Cuando Simba es un joven león adulto, se encuentra en el oasis, disfrutando de la buena vida, pero un día oye gritar a sus amigos, y ve que una joven leona hambrienta los iba a atacar, Simba lucha contra ella, y se da cuenta de que su adversaria es Nala, su amiga de la infancia, pero esa amistad poco a poco se conviete en amor, Nala le dice que su tío Scar se ha apoderado del reino y no queda ni comida ni agua, pero Simba no la escucha y se enfada con ella, pero entonces se encuentra con el viejo mandril Rafiki, que le muestra el espíritu de su padre reflejado en las nubes diciéndole que debe ocupar su lugar en el Ciclo de la Vida. Simba reflexiona y decide volver, con ayuda de Nala, Timón, Pumba y las leonas de la manada de su madre se enfrenta a Scar y a las hienas. Cuando Simba esta apunto de caer por la Roca del Rey, Scar le confiesa que fue él quien mató a Mufasa, una rabia infinita invade a Simba que lo hace subir de nuevo a la roca, Simba lucha con todas su fuerzas contra el asesino de su padre, lanzándolo al abismo, pero no muere en el acto, es asesinado por las hienas, porque antes de la pelea, Scar le miente a su sobrino que el plan de matar Mufasa fue de ellas, para que no le atacara, pues Simba era joven y fuerte, y a Scar le habían pasado factura los años, pero estas lo oyen y deciden acabar con su líder. Simba se convierte en el nuevo Rey León. La vuelta del agua y los pastos hace que los animales vuelvan a las Tierras del Reino.



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